EN BUSCA DE LA SORPRESA

Encuadrada en el grupo de los vigentes campeones y junto a Italia e Irlanda, se presenta en la Euro la selección Croata. Un equipo comandado desde el banco por el carismático Slaven Bilic y en el terreno de juego por Luka Modric. El “pequeño Cruyff” es la referencia de una selección joven, con mucha proyección, que puede ser una de las revelaciones de esta Euro. El jugador del Tottenham ya demostró en la pasada Eurocopa de Austria, su gran calidad y visión de juego, siendo incluido en el once ideal del torneo.

A su alrededor aparecen jugadores como Ivan Rakitic, Nico Kranjcar o Dario Srna, capaces de aportar mucho fútbol al combinado de Bilic. Sin duda, estamos hablando de la parte mas positiva de la selección croata, ya que el medio del campo es la línea mas fuerte y completa de la que dispone el país balcánico. Por el contrario, podemos decir que la defensa es la parte mas débil de este combinado. Jugadores lentos como Corluka o Simunic lo pasaran mal con delanteros rápidos y con mucha movilidad como Fernando Torres. En cuanto a la portería, Pletikosa apunta a la titularidad ante la falta de alternativas. De cara al gol hay nombres interesantes, pero no están rindiendo como en épocas anteriores. Eduardo da Silva, desde su lesión, no ha vuelto a rendir al nivel que consiguió en el Arsenal e Ivica Olic se encuentra posiblemente en el final de su carrera futbolistica. Por tanto, los goles dependerán del acierto de Nikica Jelavic. Jugador que esta temporada ha conseguido marcar 28 goles, repartidos en los dos equipos que ha militado (Rangers 17 y Everton 11).

Los 23 de Bilic: Pletikosa, Subasic, Kelava; Corluka, Simunic, Schidenfeld, Strinic, Buljat, Vida; Srna, Vukojevic, Modric, Kranjcar, Rakitic, Dujmovic, Perisic, Badelj, Pranjic, Ilicevic, Mandzukic; Jelavic, Olic y Eduardo.

Para Croacia, se avecina una Euro complicada, pero con la ilusión de poder ser una alternativa real. Sin la presión de las selecciones favoritas, es la oportunidad para que jugadores con una tremenda proyeccion como Badelj o Perisic empiecen a dejar destellos de su calidad. A la mínima que Italia se despiste, ahí estará el combinado de Slaven Bilic.